La comunidad internacional está toda en pie ante el acto del grupo terrorista islamista Bóokòo Haram (cuyo nombre se traduce como’La pretenciosidad es anatema’, a veces traducido como ‘la educación occidental es pecado’, fuente wikipedia). Acto vil y repulsivo en el que más de 200 niñas han sido privadas de libertad en Nigeria.
Quién no ha oído hablar de la triste situación que están atravesando estas niñas. Ahora estamos con el activismo de sofá, empezando por el mío, y no hay famoso o famosa que no se precie y no se haya hecho un selfie con un cartelito en el que ponga #BringOurGirls. Hasta nuestra Cospedal se ha sumado a esta moda.
Yo lo he puesto en mi facebook, es cierto, y con todo mi corazón deseo/espero que estas níñas dejen de sufir ese terror que están viviendo y que marcará probablemente sus vidas. Soy mujer y puedo intuir su dolor, su miedo. También soy madre y me imagino los pensamientos, las emociones, los sentimientos, la rabia de sus madres,… y sólo siento ganas de gritar, de llorar. Clamo por la justicia, justicia para la mujer, para las niñas, futuras mujeres que han de traer a este mundo a los futuros niños y niñas.
Vivimos en el 2014 y estos individuos usan el término de exclavitud para hablar de la suerte que van a correr estas niñas, aventuraban en una tertulia de la SER que iban a ser destinadas al mercado del tráfico de órganos.
Vivimos en 2014 y la trata de seres humanos, la trata de mujeres (que se llamaba de blancas… los otros colores importaban menos?) sigue estando al orden del día. El pasado fin de semana veía en un documental de «la 2» sobre la mafia que la población de prostitutas en París era sobre todo de Nigeria… y pensé pues ahí van a parar estas pobres.
Vivimos en 2014 y seguimos hablando de la educación a la que no pueden acceder las niñas (esas futuras mujeres) y de lo que impone para ellas la religión, por supuesto interpretada por hombres.
Vivimos en 2014, VIVIMOS EN 2014 y por desgracia este hecho no es un hecho aislado. Afganistán donde una niña se puede casar con alguien que le doble o triplique la edad para saldar una deuda (ver). En Egipto también (ver). Las violaciones de mujeres en India (ver), donde las dotes y su incumplimiento pueden hacer que le arruinen la vida (ver). El paríso sexual de Thailandia. Los burdeles de Camboya. Los genocidios cometidos a traves del cuerpo de la mujer en Libia, Guatemala, Yugoslavia, Sudán,… Los más que sospechosos crímenes de Tijuana...
Aquí en nuestro país, sin nombrar la violencia de género que no cesa, recientemente hemos tenido noticia de la concesión del asilo a una mujer escapada de la mafia de tráfico de seres humanos en México, Paloma. Contaba con voz desgarradora, lo que había pasado y decía entre sollozos que no nos olvidaramos de las mujeres que sufren todos los días este tipo de abusos:
…mientras existan hombres que compren niñas y mujeres, mientras exista esta gente que realmente son los que hacen funcionar el motor de las mafias, mientras tengan esa falta de moral de comprar sexo y consumir drogas, esto en cualquier parte del mundo va a seguir… (ver)
Por cierto, sólo se ha concedido 2 veces asilo a víctimas de trata en España. Este hecho, aunque escaso es muy importante, porque el asilo se concedía hasta ahora a personas por problemas en sus países de origen por persecución, cuestiones políticas o étnicas y en España no se reconoció hasta 2009 la posibilidad de solicitar asilo por motivos de género. Despacio, muy despacio, se han salvado dos mujeres…. sólo dos.
Cuántas mujeres habrá detrás de los neones de carretera en las circunstancias de Paloma? Cuántas de estas niñas nigerianas podrían acabar en los clubes de carretera de este país?
No es ahora porque esté de moda, es una acción que ha de ser global. Cuando cambie la situación de la mujer en el mundo se erradicarán muchos de los problemas mundiales y empezaremos a vivir en una sociedad más justa en la que no habrá que pedir que me devuelvan a mi hija. #BringBackOurGirls
